HISTORIA DEL DESPACHO

 

 

El despacho comenzó su andadura en 1.960, fundado por el Abogado de Madrid, Alejandro Vallejo Merino, especializado en derecho civil, administrativo y contencioso, con vocación de servicio y atención personalizada de los clientes, bases fundamentales de nuestro trabajo. Somos un despacho familiar, dirigido a aquellos que pretenden un trato directo abogado-cliente, con una estrecha relación de trabajo, efectividad y confianza. Consideramos el trato humano cercano parte esencial de nuestra profesión, de forma que cada abogado recibe y trata su asunto de forma personal desde su comienzo hasta su finalización, poniendo nuestros más de 60 años de experiencia acumulada al servicio del cliente y sus necesidades, y cuidando de cada cliente como si fuera el único.